Grafoterapia

La Grafoterapia se basa en el convencimiento de que si nuestra escritura responde directa y automáticamente a nuestro estado físico y emocional también debe ser posible actuar en sentido contrario. Con ejercicios grafoterapeúticos es posible generar en el funcionamiento del cerebro, nuevos reflejos condicionados que según Pavlov actuarán sobre las glándulas endocrinas, las cuales producirán una nueva bioquímica capaz de regular el equilibrio del organismo, lo que sin duda ayudará a resolver su patología.

¿En qué nos puede ayudar la Grafoterapia?

Este sistema de análisis permite detectar trastornos de comportamiento con su posterior corrección, e incluso es capaz de prevenir enfermedades psicosomáticas y curarlas.
Por ello sus beneficios en nuestra salud abarcan a numerosas dolencias ya sean físicas, mentales y/o relaciónales.

Origen e historia de la Grafoterapia

La Grafología o diagnóstico de las personas a través de la escritura es una ciencia que se viene estudiando desde hace muchos siglos pero, en cambio, la Grafoterapia que es el modo de corregir esos desequilibrios es relativamente reciente.
Aunque en cualquier campo siempre hay personas que destacan en el estudio de esa técnica, en el caso de la Grafoterapia hay una persona que destaca especialmente y es el profesor Vicente Lledó.
La relación entre cada trazo y la función que representa fue establecida por el profesor Lledó de una forma empírica tras el estudio y el análisis de cientos de escrituras. Cada uno de estos trazos contiene un significado psicológico, representando las doce funciones esenciales que realiza el ser humano.

Esto es lo que el profesor Lledó denomino: esencias del trazo. En ellas observó que cada trazo se debía ejecutar con unas determinadas esencias, para que la función a la cual representan se realizara de forma correcta, por lo tanto existe un modelo para la realización de cada trazo.
A la luz de este sistema, los problemas psicológicos de un individuo, se manifiestan en funciones incorrectas de realizar los trazos escritúrales, y modificando la forma de ejecutarlos, acercándola lo más posible al modelo conseguimos que la persona, lleve a cabo estas funciones de una manera correcta, lo que sin duda ayudará a resolver su patología.